23 de Abril día mundial del libro 

¿Pero quien fue Miguel de Cervantes Saavedra

Miguel ?BIOGRAFIA PARA NIÑOS 


Miguel se  disponía como cada día a devorar uno de sus libros cuando oyó a su padre decir que se volvían a mudar. ¡Otra vez! – pensó para sus adentros.

Desde su nacimiento en Alcalá de Henares, ya se habían cambiado de casa varias veces… A Córdoba con la familia de su padre, a Sevilla, a Cuenca… y qué sé yo cuántos sitios más. Siempre en busca de trabajo para poder salir adelante. Miguel creció así, viajando de un sitio a otro, rodeado de su familia y leyendo, siempre leyendo. Y así se hizo mayor.

Siendo mayor, tampoco dejó de viajar. Le acusaron de herir en un duelo a un hombre, y querían meterle en la cárcel, así que huyó a Italia. Allí trabajó, hasta hacerse soldado para luchar en la guerra.


Estuvo en muchas batallas y, en una de ellas, en Lepanto, una bala le alcanzó y comenzó a perder fuerza en su mano izquierda. Por eso empezó a ser conocido como 'el manco de Lepanto'. Y… ¡menos mal que era diestro! Porque, ya desde hacía tiempo, además de leer ¡le encantaba escribir!


Después de la guerra, al volver a España y cuando ya casi alcanzaban las playas de la Costa Brava, una flotilla turca lo secuestró y lo tuvo como esclavo durante cinco años en Argel. ¡¡Cinco años!!

Miguel no podía más, se intentó escapar de allí varias veces, pero nunca lo conseguía. Al final, gracias a un rescate, pudo ser libre.


Ya estaba en España, por fin… Ahora tendría que buscar trabajo de lo que fuera para poder pagar sus deudas. Su familia había pagado mucho dinero por su rescate y todo ese dinero lo tendrían que devolver.


Estuvo años trabajando entre Madrid y Andalucía. En Sevilla, le encargaron recaudar impuestos. Tenía que ir casa por casa recogiendo dinero de las familias para pagar las distintas guerras en las que el país estaba metido por aquella época ¡Qué tarea tan horrible! Le acusaron de haberse quedado dinero y lo encerraron en la cárcel unos meses.


Encerrado en la cárcel, sin móvil, sin Tablet… Todos sus pensamientos se pusieron en marcha para empezar a imaginar al personaje protagonista de la que sería su obra maestra. Un hombre alto y muy loco, que confundía los molinos de Castilla La Mancha con gigantes con los que luchar: El ingenioso hidalgo Don Quijote de la Mancha.

Murió en Madrid, en su casa, cuando tenía 68 años. Quiso que lo enterraran en la capilla de una iglesia próxima, sobre la que después se construyó una iglesia más grande. Y aun en nuestros días, no se sabe dónde están sus restos…

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